Uno de los monumentos más destacables de Riogordo es sin duda la Ermita de San Sebastián o de Jesús Nazareno, en la que podemos encontrar en su interior un camarín barroco con la imagen del nazareno. Podremos acceder paseando entre sus casas solariegas.
Junto con la Ermita, despunta la Iglesia de Nuestra Señora de Gracia de 1490. A tan solo un minuto a pie, encontraremos el Museo Etnográfico.
Este museo es una clara representación de las costumbres y de la trilogía mediterránea (pan, vino y aceite), propia de los pueblos de esta zona de la Axarquía. Podremos ver en su interior una almazara con el respectivo molino de aceite, en el cual se utilizaban las bestias para poder obtener el aceite.También observaremos un molino de harina, un antiguo lagar, bodegas y los utensilios diarios que se empleaban en las casas del siglo XIX.
Hablar de Riogordo es hablar de El Paso. Se trata de la fiesta más importante del año en el municipio y se lleva a cabo en la Semana Santa a través de la escenificación de la vida, pasión y muerte de Jesucristo, representado por los propios vecinos del pueblo. La repercusión de este evento religioso ha ido aumentando hasta ser considerado como fiesta de interés turístico nacional. A escasos minutos nos topamos con el Parque Tres Cruces, donde podremos descansar en familia, realizar picnics, relajarnos o realizar actividades al aire libre.
Además, en la antigua entrada del pueblo nos encontramos con el emblemático Puente del Olivar, de origen medieval. Fue construido sobre el Río de la Cueva, en el que podrás tomar fotos increíbles del entorno. Dicho puente conecta con el pueblo vecino de Colmenar, a través de la recientemente reformada Carretera de Riogordo.
Este entrañable municipio también ofrece interesantes vestigios arqueológicos, como son los restos fenicios en la Sierra del Rey, observando en el suelo lo que fueron las tumbas de una de las civilizaciones más antiguas del territorio, como también encontraremos en la Villa de Auta los restos romanos en forma de mosaicos.